Técnicamente, el umbral anaeróbico es el nivel de intensidad a partir del cual se produce un gran incremento en la cantidad de lactato (ácido láctico) que se acumula en la sangre. El cuerpo necesita urgentemente energía, y pasa a consumir los hidratos de carbono.
En otras palabras, es el límite de nuestro rendimiento, es decir, pasado este punto es imposible rendir a más nivel. Es fundamental en los ciclistas aumentar el umbral anaeróbico para aguantar más tiempo sin fatigarse.
Estos son algunas circunstancias adversas que se producen al no tener entrenado el umbral anaeróbico:
Al ser tramos largos de muchos kilómetros, es imposible no encontrarse caminos o firme que nos obliguen a realizar esfuerzos de alta intensidad. Lo que repercutirá en una enorme fatiga al no estar preparados.
El entrenamiento del umbral anaeróbico será muy beneficioso en multitud de aspectos, especialmente si eres ciclista o practicas deporte:
Al principio, nuestro umbral anaeróbico se situará entre el 70 y 80% de nuestro pulso cardiaco, teniendo como objetivo con el entrenamiento situarlo cercano al 95% de este, es decir, lo más próximo posible al consumo máximo de oxígeno.
Como se ha mencionado anteriormente, la mejor forma de entrenar este umbral es con la realización de ejercicios de alta intensidad en pequeños y cortos periodos de tiempo. Es muy importante conocer el número de pulsaciones en la que se encuentra tu umbral, ya sea yendo a una clínica o realizando el Test de Conconi.
El Test de Conconi se basa en el control de la frecuencia cardiaca en la ejecución de ejercicios de intensidad progresiva. Se establece una relación directa positiva, es decir, la frecuencia cardiaca se irá incrementando a medida que la intensidad del ejercicio aumente.
Pero al llegar a cierto punto esta relación directa se rompe, y la frecuencia cardiaca se estabiliza a pesar del incremento de la intensidad en el ejercicio. En ese punto se encuentra nuestro umbral anaeróbico.
Con un umbral de 170 pulsaciones se recomienda el siguiente entrenamiento:
Es recomendable efectuar intervalos de 5 a 10 pulsaciones inferiores al umbral, teniendo una duración menor aquellos ejercicios que provoquen pulsaciones más cercanas al umbral.
En definitiva, si te gusta el ciclismo, debes conocer en qué lugar se encuentra tu umbral anaeróbico y ser consciente de que mejorarlo supondrá enormes beneficios para ti, así que no lo dudes.